MÚSICA PARA EL ALMA

domingo, 30 de octubre de 2016

LA VIDA NO SE ENTIENDE



LA VIDA NO SE ENTIENDE

La vida no se entiende.
Ni se deduce, ni se adivina,
ni se despeja como una ecuación
matemática con el resultado
definido de estabilidad.

La vida se siente,
se sucede, pasa, se marcha,
vuela como el mismo tiempo
en el que cabalga imperceptible,
y, ante todo, solo llega
una vez a cada corazón.

Yo por eso he dejado ya
de preguntarle cómo está,
y cómo le va.

Sencillamente, la recibo
cada día como viene.

Porque la vida no se entiende:
simplemente se vive.

sábado, 29 de octubre de 2016

NO ESTOY



NO ESTOY

No estoy en casi ningún
sitio de este planeta
y, sin embargo, formo parte
de todos los lugares del mundo
en los que el amor tiene algo
hermoso que contarme al oído,
en un leve susurro o una poesía.

Desde que se me ha abierto
en el pecho el camino infinito
al universo maravilloso de la belleza.

No estoy en casi ningún sitio,
pero en todos voy con el universo.

Desde que soy también
el universo con la belleza.

viernes, 28 de octubre de 2016

MI OTRA MADRE



MI OTRA MADRE

Esta otra madre
de la que quiero hablarles
es algo distinta a lo habitual.

No retoña hijos,
ni sabe de gestaciones,
así como tampoco se abrasa
al calor de un amor
del que solo saben
quienes lo han vivido.

En todo caso, pese a todo,
esta madre es también maravillosa.

Retoña hijos de esperanza,
alumbra versos de esperanza
cuando llega desde la nostalgia
o las ganas de seguir contemplando
la vida y el mundo desde la belleza
y, en ocasiones, hasta regala el mar
en alguna metáfora lejana.

Esta otra madre
de la que quiero hablarles
me parió por segunda vez
una tarde de enero
de hace ya unos cuantos años.

Y desde entonces, no he podido
despegarme de sus enaguas
de utopías y sueños posibles.

Mi otra madre,
por si no lo han adivinado,
se llama Poesía.

jueves, 27 de octubre de 2016

NO QUIERO SER, NO HE GANADO



NO QUIERO SER, NO HE GANADO

No quiero ser nada,
porque ya soy yo mismo.

Y me basto.

Tampoco he ganado nada,
aunque quizás ya me haya alzado
con la mejor victoria de todos:
haber nacido para amar el mundo.

Ya ven: no quiero ser,
y tampoco he ganado.

miércoles, 26 de octubre de 2016

SENTIRSE TODAVÍA NIÑO



SENTIRSE TODAVÍA NIÑO

Deshilachaba una nube,
hecha jirones de utopía.

Me había despertado hace rato,
y seguía cabalgando a lomos
de una desbocada imaginación.

Amanecían ya entonces
algunas canas en mi cabello.

Daba gusto sentirse aún niño,
y volar un rato por los sueños,
aun ya entraditos los treinta.

martes, 25 de octubre de 2016

NO NECESITAS NADA



NO NECESITAS NADA

No necesitas nada,
salvo hallar tu propia paz.

Despejar tu camino de piedras,
dudas, miedos y objetos fútiles
que parezcan darte lo que buscas,
aunque nunca te colmes de alegría
después de pagar los recibos.

No necesitas nada,
salvo estar contigo mismo,
conscientemente.

Entonces, sobrará todo lo demás.
Y dentro del mundo te encantará
saber que tienes tu propio mundo.

Aparte de eso, 
no necesitas nada más.

sábado, 22 de octubre de 2016

TODO LO QUE NOS DEJAMOS



TODO LO QUE NOS DEJAMOS

Hubo una tarde en la que dejamos
algo más que otro día morir
tras otras semanas que se siguen
como un tiovivo sangrante de tiempo
que degrada desde las vueltas
sempiternas de la sangre
en las venas.

Y en ella voy a decirte
todo lo que nos dejamos.

El aire en un suspiro.
Los labios en un beso
que sigo persiguiendo
tras una ausencia lejana
en las estelas silentes del viento.

Y los sueños un momento
en un cajón maravilloso de caricias,
y un susurro en los verbos
sin palabras del tacto.

Todo lo que nos dejamos
aquella tarde solo lo saben
nuestra vergonzosa desnudez,
y las paredes de una casa
cuyo paraíso la ciudad no conoce
como le gustaría a alguno.

Todo lo que nos dejamos
aquella tarde aún lo llevo
en algún recuerdo de ti,
que no olvido desde el alma.

Todo lo que nos dejamos, sí,
más el mundo donde lo dejamos.

Todo lo que nos dejamos.

viernes, 21 de octubre de 2016

SIN ESCRIBIR



SIN ESCRIBIR

Llevo tiempo sin escribir,
y el aparente silencio
de mi verbo calmo se prolonga
ya algunos días.

Tal vez, ya no surges 
de ningún sitio,
cual ola imprevista de ganas,
 hasta el verso,
como antes cuando de cualquier cajón,
rincón, pared, cosa o nadería
emergías cual rosa en pleno otoño
de una primavera antes de que la tierra
quisiera acoger sus raíces
llenas tempranamente de abril.

Llevo ya tiempo sin escribir,
y no sé por qué no se sueltan
mis palabras como las aves 
libres que suben al monte.

Se sienten como aprisionadas
nubes grises en tempestad,
que deben romperse irremediable
con la lluvia para luego morir
en algún charco triste.

Llevo ya tiempo sin escribir
y, tal vez, no debería devanarme
tanto los sesos por encontrar
la metáfora perfecta con que devolverte
ausente a mi vera.

Ya basta quizás con que ahora,
en este instante, no te olvide,
y sin querer haya salido otro poema
de los umbrales de mi recuerdo.

No muy bueno, pero suficiente
tras tanto tiempo sin escribir.

miércoles, 19 de octubre de 2016

EL MAR NO AHOGA



EL MAR NO AHOGA

El mar no ahoga: es natural
como el agua que bebemos
y el aire de sueños que respiran
nuestras alas cuando ansían
la libertad de la conciencia
sin que en un cajón de rutinas
se encierren lágrimas de bienestar.

El mar no ahoga, sino el miedo
a nadar sin rumbo predefinido,
quizás, hacia lo temerosamente
infinito de sabernos pájaros
sin jaula en estas urbes de cristal,
con muchas utopías rotas
tras los barrotes de diamantes.

El mar no ahoga, no.
El mar no ahoga.

domingo, 16 de octubre de 2016

HEMOS VENIDO PARA VIVIR



HEMOS VENIDO PARA VIVIR

Hemos venido a este mundo
por muy diversas razones.

Hemos venido para respirar
el aire que el viento empuja
hasta nuestros pulmones repletos
de aliento de pájaro y sueños.

Para sentir, para llorar, para emocionarnos.
Para creer en utopías similares
a pensar que en algún momento,
y en algún sitio las estrellas
pueden alcanzarse con solo cerrar
el puño y atrapar con un anhelo
su luz universal y cósmica.

Y albergar siempre la esperanza
de que en los charcos algún día
pueda caber un océano de deseos
y ganas de vivir bien satisfechos.

Para besar, para amar, para desamar,
para estar y para no estar.

Para encendernos y que nos enciendan.
Para guardarnos y que nos guardan.
Para recordar y que nos recuerden.
Para olvidar y que nos olviden.

Hemos venido a este mundo
por diversas razones y motivos.

Pero sobre todo hemos venido
a una cosa en concreto.

Para vivir. Para eso hemos venido
a este mundo: para vivir.