HA PASADO OTRO AÑO

HA PASADO OTRO AÑO

Ha pasado otro año

en este instante,

casi otro momento de polvo.

Y envejece un poco la pupila,

mientras se clava, a veces,

una mirada en la nada

o en un horizonte de pensamientos,

recuerdos y nostalgias.

Somos algo más viejos,

mientras la luz de otra estrella

esta tarde sigue extinguiéndose

dulcemente en tu fugacidad,

y en la nuestra y en la de ellos

de universo y corazón latiendo.

El viento sigue acarreando

otras historias antiguas.

Machado y su camino

todavía siguen conmigo.

Y la noche, pese a lo que digan,

hoy volverá ser joven

mientras algún poeta

siga sentándose en el asiento

de sus versos a soñar.

Y la felicidad no madure

demasiado, más de lo debido.

Otro año más

queramos seguir viviendo.

POR ESTAS PALABRAS

POR ESTAS PALABRAS

Por estas palabras

han pasado otros lápices

como tus ojos dibujando

bosques de alegría

entre avenidas de tristeza:

belleza han sido ellos

y belleza has sido tú.

Y por estas calles

de flores, y vestidos verdes,

y naciones de viento,

y cuadernos de agua,

y alamedas de faros,

y lágrimas han atravesado

la metáfora otros como yo,

con mucha deriva, y a veces

sin la suerte del poema.

Yo ahora no soy más

que otra sílaba cenicienta

en el libro de los siglos.

Tal vez, contigo.

DAME TU SANGRE

DAME TU SANGRE

Dame tu sangre.

Bebamos de esa ebriedad

sin vino que brinda

el amor.

Y lanzémonos sin paracaídas

por esa cascada de emociones

en la que el fondo lo ponen

los besos de agua

que me das y moldean

ahora estos pasos

tímidos hacia la belleza.

Dame tu sangre esta tarde

sin dejarte atrás el corazón.

.

Para que nos amemos mejor.

POEMA DE NAVIDAD

POEMA DE NAVIDAD

Llega el 25 de diciembre.

Se llenan de edelweiss

los escaparates.

Todo el mundo mira

al otro lado de la miseria.

Hay que seducir incluso

a Afrodita si es preciso,

y no hay tiempo para llanto,

desahucios o atender a un Baltasar

sin pajes ni magia

en la esquina de cualquier calle.

Y que cante alguien

la marimorena de los ERE,

mientras brindan con champán

quienes quieren purgar pecados

de cariño interesado

y caridad mediática:

basta cuatro domingos

de adviento en misa

para no ser más diablo.

Ya no tiran equinos
precisamente de una Troika.

Y no apetece demasiado cantar
villancicos que ya no entonan
coplas de labranza o églogas.

Navidad, sí, dulce Navidad..

NO TE DEJES

NO TE DEJES

No te dejes 

tus palabras, tu sonrisa,

tus labios, y tus besos,

tu alma y tus pasos,

tu camino y tus sueños

al otro lado del sendero

cuando andes tu existencia.

El tiempo no es baldío

cuando las horas pasan,

y ocurres, y llegas a ser,

a veces, más que nadie

en el corazón de otra vida.

No te dejes, vive.

LA MEJOR CANCIÓN

LA MEJOR CANCIÓN

La mejor canción ahora
es tu sonrisa pintada de dulzura,
alegría y mar.

Y cantarla es algo así
como hacer navegar
a la tristeza en un océano
de aceite y a los sueños
mandarlos a galopar
sobre tus besos.

Cántame otra sonrisa,
por favor, mientras detienes
tiernamente esta poesía
mirándome.

CUENTOS CELESTES

CUENTOS CELESTES

Ahora cuento mariposas

en el estómago como si polinizaran

la ternura en cada temblor.

Y cuento también algo celeste

como el mundo cuando tú

lo miras, y sé que me miras.

Cuando se abre el telón

de madrugadas que oculta

tu cuerpo tras el viento.

Y no queda tan lejos tu sexo,

tu pubis esmaltado y tus senos

turgentes de mis manos

enraizadas a tu caricia

como un árbol a su raíz.

Ahora cuento mariposas.

Tiemblo dulcemente,

mientras te quiero.

LA TIERRA QUE QUIERO PISAR

LA TIERRA QUE QUIERO PISAR

La tierra que quiero pisar

ahora son tus labios.

Como si fuesen frutos

de la carne. Como si andar

en un zapato de papel

y metáforas por tu cuerpo

fuese posiblemente imposible.

Y como si el cielo lo gobernase

un conde de las estrellas:

mi mirada alzándose en el trono

universal de tus pupilas,

mientras se eleva otro poema

hacia tus curvas.

Y solo quiero pisar

la tierra agridulce que han dejado

tus labios después de un beso

sin adiós definitivo.

TOCAR EL AMOR

TOCAR EL AMOR

Tocar el amor.

Sin sueño, sin pausa.

Desde tu nombre,

hasta tus pestañas.

Desde tu ser,

hasta tu cuerpo.

Sin pausa, sin ausencia.

Tocar el amor,

mientras te amo.

Y me late el corazón

de estar vivo.

SABEN QUE EXISTO

SABEN QUE EXISTO

Saben que existo

mis palabras.

Lo que digo, y callo.

Lo que escucho y contemplo.

Lo que son mis ojos

cuando abarcan el mundo,

y lo que soy sin ser,

a veces, más que nadie.

Saben que existo

mis palabras, y los que ahora

quieren recordarme.

Mientras escribo

mi vida.

NO CONOCE

 

 

NO CONOCE

 

No conoce el sabor

a amistad o ternura

de unas burbujas de café.

Aún no ha salido afuera

del latido hacia el corazón.

Todavía no sabe qué es emocionarse.

Y ahora desde el poema,

solo puedo invitarte

a darte un paseo

por nuestro sueño.

TRISTEZA DE CHOCOLATE

TRISTEZA DE CHOCOLATE

Me he preguntado siempre

a qué saben tus besos.

Si saben a primavera cálida

o frío invierno.

Y si rozan el paladar

de los sentidos como el agua

cuando el mar corona

la orilla en su eterna

boda con la playa.

Y tus caricias, y tus senos

mientras se amoldan a mis dedos

en un instante de lujuria.

Si sabes a chocolate caliente.

A naranja madura, a banco vacío

O a manzana prohibida

de esas que solo existen

cuando los sueños

abren el telón del paraíso

en tu cuerpo desnudo.

Si son chispas de placer

que queman lo mismo que enfrían.

Tornando esta tristeza

de chocolate en algo aún más dulce:

quererte sabiendo que me quieres,

aunque no nos queramos mucho

desde ahora y hasta casi siempre.

¿A qué saben tus besos?

NO SOMOS, NO ERES

 

 

NO SOMOS, NO ERES

No somos, no eres.

No hablamos, no hablas.

Te callas en tu silencio

de amapola y distancia constelada.

Y mirarte se torna

en un ejercicio por encontrar

algún hueco para la calma

entre tanto bullicio mundanal,

donde ya quisieran las náyades

conquistar algún marinero.

No somos, no eres.

Más que dulce silencio.

ALGÚN DÍA NOS IREMOS

 

 

 

ALGÚN DÍA NOS IREMOS

Algún día nos iremos,

y no seremos nadie,

salvo nuestros recuerdos.

Vendrán otros momentos

que nos bendecirán

con instantes de jolgorio

o tristeza.

Seremos parte de otras ausencias.

Diremos adiós al caminar,

poco a poco, como el murmullo

sibilante de un río que rompe

su corriente en el mar.

Habrá algún hueco

para la belleza en una nación

de besos de asfalto

y tiernas avenidas de flores

cansadas de ser esquejes de pavimento.

 

Y amaremos, con certeza

y sin dudas alguna tarde.

 

Hasta la vida....

 

Algún día nos iremos.

 

 

EL VIENTO ES UNA BARRA

EL VIENTO ES UNA BARRA

El viento ahora es una barra

de labios donde se sirven

despedidas melancólicas,

y tu carne después de los labios.

He de volar alto

para caer en tus brazos,

y esconderme en el hueco

efímero de una metáfora

y para mirarte, muchas veces,

no me bastan los ojos:

las lágrimas se tornan

en pupilas de bella tristeza,

mientras te recuerdo cómo venías

dulcemente aquella tarde de abril.

Dame, si no es tiempo,

la eternidad de tu verbo

de ausencia palpitante.

Para mis palabras,

mientras las sirvo

en el viento.

VENUS SIN MILO

VENUS SIN MILO

Vuelve a espantar palomas

tras cincuenta años de consciencia.

Ellas vuelan alto. Sonríe,

mientras otro perro le ríe

la gracia al ladrar.

Me dice: ¿No ves

a ese pizquillo?

Hoy se ha puesto

otra camiseta de sueños

con la inocencia al desnudo.

Y cada día parece más feliz,

aunque en los recuerdos

se le haya quedado la estatua

de la belleza de Venus

sin mucho Milo en el porvenir.

Sus ojos recorren el horizonte

de alguna foto sin más imagen

que un pronombre o un monosílabo.

Sí, son ellos: afirma

al mirarnos el rostro

de Super 8 tras un marco

de cuando éramos sus hijos.

Ya no se acuerda, a veces,

de que nos tuvo una noche

de hace casi treinta años.

Está volviendo, sin embargo,

a ser ella y su inocencia.

Una Venus sin Milo

a la que no le importa mucho ya

ser modelo de pasarelas olímpicas.

Solo espantar palomas,

y sonreírles mientras

vuelan alto.

NOS MIENTEN

NOS MIENTEN

Nos mienten de verdad,

y sobre la paz armada

para un futuro sin bombas.

Y hay otros que vomitan

la avaricia sin alternativas.

Y yo me voy corriendo

a esconder mis pájaros

de plastilina a mi silencio.

Las mariposas son muy frágiles

cuando los sueños los rompe

un cruz de dinero y austeridad.

Nos mienten.

De verdad nos mienten.

TU NOMBRE ES SUAVE

TU NOMBRE ES SUAVE

Tu nombre es suave

como el verbo de corriente

aérea del viento,

y la palabra tierna

y dulce que esconde

cada noche el silencio

cuando te colma de belleza

un poema mío,

sin más labios

que tu ausencia.

Y como tus manos

de aliento, y rosas

sencillas.

Tu nombre es mágico.

Es la primavera, el sol,

las estrellas, los barcos

de sueños que van a tu deriva.

Y casi, nada, y casi todo.

Tu nombre, suave.

SUENA EL MUNDO

SUENA EL MUNDO

Suena el mundo

la melodía de rutina

de la calle, y en el hueco

de una esquina alguien hilvana

otro sueño sin que Morfeo

todavía lo derrote.

Y la dicha lo reclameç

a su vera, sonriendo.

Escribo otra poesía.

Se apaga el ruido

de este cansancio de flores,

y asfalto de la urbe.

Y sueño despierto

con la vida.

Y contigo.