NO SOMOS NADA, NI NADIE
No somos nada, ni nadie
si dejas de darnos tierra,
y se secan tus ríos y lagos.
Y mientras se agostan los campos,
seguimos quemando cartuchos
de esperanza en la selva.
No somos nada, ni nadie,
sin el rumor maravilloso
de tus olas cuando rompen,
ni el viento que empuja
al suelo las primeras hojas
caducas del otoño,
ni tus animales correteando
libres por bosques y praderas.
Te necesitamos para las alas
de los sueños que nos inspiran,
y el aire que respiramos,
y el alma que nos revive,
y la pasión que nos mueve,
y la primavera que nos alimenta
la utopía de un mundo nuevo.
No somos nada, ni nadie,
sin ti, planeta Tierra.