SERENIDAD
Serenidad, y paz.
Las busco, pero no llegan.
Son, a veces, como barcos
que se ven a lo lejos
y nunca arriban a puerto.
Se marchan, y las busco.
Quizás, deba dejar un poco
de hacer la guerra conmigo.
No existe más belleza que atrapar los sonidos del mundo en unas palabras y ahondar en sus misterios por medio de las palabras de un poema.
SERENIDAD
Serenidad, y paz.
Las busco, pero no llegan.
Son, a veces, como barcos
que se ven a lo lejos
y nunca arriban a puerto.
Se marchan, y las busco.
Quizás, deba dejar un poco
de hacer la guerra conmigo.
La vida ha de pasar.
Sin parar, sin detenerse
como los pies de agua
de una gota en los charcos,
cuando llueve.
La vida ha de pasar
sin que se pueda devolver
al tiempo los ojos perdidos
de quien contempla
paraísos en las musarañas.
Y tan sólo nos queda un remedio
contra las horas:
caminar sin arrugarnos demasiado.
La vida ha de pasar, irremediablemente.
DECIR POESÍA
Decir poesía ahora
es algo más que declamar versos.
Es hablarte, y dejar que responda
un beso tuyo en mi mejilla.
Es tocarte, a veces, sin manos.
Y esperar que responda algún abrazo,
mientras delineo tu silueta
en algún papel o algún sueño
del que nunca acabo de despertar
después de abrir los ojos.
Decir poesía es decir ahora
tu nombre. Y pensar, tal vez,
que llegarás a volverte carne.
Y no un hermosa estatua de tinta
nunca puedo palpar.
Decir poesía...
Esperarte frente al mar
a que vuelvas a mi cuerpo.
YA ES MARAVILLOSO
Ya es maravilloso que llueva,
y poder sonreír al aguacero,
cuando corren puentes de agua
por un cuerpo húmedo.
Pero es aún más bello tocarte.
Y que la ternura tuya inunde los pozos
de melancolía de mi alma
de lluvia salada y largos besos
a la luz de algún deseo irrefrenable.
Si tan sólo lloviera ahora.
Y no fueran resbaladizas las aceras,
sino mis manos sobre tus carreteras
hermosas de piel.
NUNCA ME HAN IMPORTADO
Nunca me han importado
demasiado las faltas de ortografía,
cuando se trata de mi historia.
Ningún camino por el que se anda
es del todo recto.
Y, muchas veces, también la duda
se asoma a la memoria.
Y me pregunto:¿Quién soy?
Será, tal vez, algo complicado
escribir la vida
con perfecta ortografía.
TENGO UNA FORTUNA ÚNICA
Tengo una fortuna única
que no está al alcance de nadie.
Puedo andar caminos,
quedar a la una, y esperar,
a veces, hasta las doce
para que lleguen los ojos
que ansío mirar, cuando sólo
puedo cerrar ya los míos.
Recordar después tan sólo, también,
lo que pudo ser un abrazo
a la ternura.
Y contar lo que me ocurre
sin pedirle permiso a ninguna historia
para escribirme.
Tengo una fortuna única
en mis manos
que no está al alcance de nadie.
Simplemente, estoy vivo.
EL TIEMPO SE LO HA LLEVADO TODO
El tiempo se lo ha llevado todo
como un viento que no silba,
y arrambla todo lo que encuentra
sin avisar en el aire.
El tiempo se lo ha llevado todo.
Los vuelos en bicicleta,
los sueños que un avión
de papel sostenía en la infancia,
las orillas infinitas de los ojos
que no pecaban de prudentes.
Y ahora también
el tiempo te ha llevado.
Aquella cita a la una
en aquel mes de otoño,
las caricias que ya no dan calor.
Y un momento inane de ternura
a las doce y media de algún sueño:
las mariposas ya se han quedado dormidas.
El tiempo se lo ha llevado todo.
Y también a ti.
No quedan más que unos recuerdos
para volver a aquella cita.
A aquel momento de calor
que tanto frío me provoca
ahora en el alma,
cuando estoy solo
con tus recuerdos.
BREVE VIDA
La vida es un metro que se escapa
en cinco minutos a la otra
punta de la ciudad.
Un leve suspiro que se marcha
de la boca antes que el viento
pueda atrapar la voz
que esconde en el aire.
Un corto camino de espinas,
flores, y piedras con las que se tropieza.
Tres segundos para amar,
y un solo momento
en que vivir el imprevisto
eterno de existir.
La vida.
Cinco segundos antes
de naufragar para navegar.
Y, tal vez, un segundo
en que sentir latidos
antes de morir.
ESTOY TAN LEJOS
Estoy tan lejos de mí mismo,
como a varios recuerdos de distancia.
Si tan sólo pudiera devolver
a la tierra momentos
con los ojos de la nostalgia
que ahora emerge de mis entrañas
como una ola infinita de lágrimas
sin fuente.
Estoy tan lejos, tan lejos
como a demasiados recuerdos
de lo que nunca quise
que se marchara:
el amor a libertad
de mi vida.
At the touch of love
everybody becomes a poet.
CUANDO NOS TOCA EL AMOR.
Cuando nos toca el amor,
todos nos volvemos poetas.
Supongo que nos cambian los ojos.
Y vemos arder pletóricas
primaveras en el hielo.
El amor nos cambia, quizás.
Y nos moldea a la forma
de la ternura que no conoce
fealdad en ninguna silueta.
Todo se nos vuelve bello
Y contemplamos, incluso,
vida donde no hay más que silencio.
Y un entierro de susurros hermosos
de pronunciar en otros tiempos,
ahora emerge, amando.
Y llegamos al maravilloso
misterio de amar de la vida.
Poesía en cada uno
de nuestros poetas el amor.
MARINERO SIN TIMÓN
Siempre he sido un marinero
sin timón, ni amarras, ni anclajes
de la vida.
Muchas veces, he naufragado
en islas de soledad.
Otras he llegado a algún continente,
y me quedado un suspiro
de alegría que se ha marchado.
Y no importa ya
cuántas curvas queden por franquear,
Tampoco cuántos temporales
queden por capear,
aunque no haya un rumbo fijo:
la vida nunca va en línea recta.
Tan sólo espero, ahora,
que ocurra el próximo imprevisto.
A ver si no me tumba.
DE VIAJE AL AMOR
Todos los días salgo de viaje,
a veces, sin llegar a ningún aeropuerto.
Salgo contigo, salgo de paseo
con las manos a tus caminos
de piel que atnto me gusta
recorrer como un extraño mapa
de curvas que no conoce mapamundi,
ni fronteras políticas, ni relieves en los Atlas.
Parto al amor. Y mis manos
se visten de palomas
para volar contigo a la ternura.
Salgo de viaje sin horarios.
Y cada tarde, y cada noche
es una aventura diferente
tenerte al lado en la almohada,
aunque, a veces, no estés conmigo.
Y no me toques
Me basta soñarte para marcharme
al mejor de los viajes de la vida.
De viaje al amor.
ME ESTOY YENDO
Me estoy yendo bastante rápido
como un leve suspiro
que casi no roza el aire.
Y se marcha
Me estoy yendo
raudo como el agua de un río
cuya corriente nunca se sabe
si volverá a fluir por el bosque,
después de la primavera
Me estoy yendo.
Y no es bueno, quizás,
que tenga demasiada prisa
por marcharme.
Hasta llegar a vivir.
EL AMOR
El amor no avisa cuando viene.
Y toca las puertas del corazón
sin pedir permiso de sístole,
y diástole.
El amor, simplemente, llega
como una gota de agua inesperada
entre toda la arena de un desierto.
El amor viene.
Y empieza a memorizar otro calor
que no conocen los astros.
El calor de dos cuerpos
que arden sin llama aparente.
El calor de la ternura
conjugada de los cuerpos.
El amor como un imprevisto
llega. Y desencadena terremotos
sin que ninguna onda sísmica
detecte epicentro alguno:
el maravilloso desastre de amar
sólo a ellos les pertenece.
A quienes se aman.
MAESTRA VIDA
Me han enseñado números,
cálculos, algo de lengua,
gramática y varias cosas,
en la escuela. Y siempre me falta
saber algo más de nada.
Entonces, la vida acude a mi encuentro.
Me siento al lado de las olas,
y escucho cómo cantan en ese lenguajje
blando de agua que tanto me gusta.
Los árboles, también, se suman
a la fiesta, y me deleitan los sentidos
con bailes de primavera.
Aprendo algo más, entonces,
que palabras de teoría.
Y veo a la vida
como mi futura maestra.
Hasta que la muerte me separe.