SUPE DE REPENTE
Supe de repente
que te quería
No urdí ningún plan,
ni puse flores
en cuaderno alguno
a ver si te sembrabas
en alguna línea.
De repente, como llueve
el agua en las alfombras
de yeso y asfalto de las calles.
Así supe que te quería.
Sin que avisara un golpe
en la puerta.
Sin que al corazón
le diera tiempo de asimilarte.
Sin que llegara el viento
antes a murmurar en la ventana.
Quise escribir el mejor
poema del mundo.
Y ahí estabas, de repente.
Como, de repente,
también supe que te quería.
0 comentarios:
Publicar un comentario