SÉ QUE TENGO UNA DEUDA CONTIGO
Me regalas esa mirada tan linda
con esos ojos que me preguntan,
a merced de las ganas
mudas con las que me tocas
el alma más que las manos,
si yo también te quiero.
Y me encantaría devolvértela.
Sé que tengo una deuda contigo.
No hablo de mandarte flores,
bolsillos llenos de ángeles,
puentes cruzados por mariposas,
o mis tristezas sencillas
enjuagadas en un almíbar
de pura nostalgia.
Tan solo quiero quererte
como siento que tú me quieres.
Y si es preciso conjugar
la tarde mientras se asoman
los besos a los labios,
y con el rostro lleno de rosas
te devuelvo esa deuda
que ahora tengo contigo:
amarte como tú me amas.
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