NO PUEDES HABERTE IDO
No puedes haberte ido.
Y voy a decirte por qué.
El recuerdo es como un ancla
que corrige la deriva de un instante
hacia el olvido, y lo trae de vuelta
hasta los puertos frágiles
y desnudos de la memoria.
Y yo no te olvido.
Es más, diría que te recuerdo
bastante bien.
Por eso, no puedes haberte ido
con tus besos más allá del mundo
infinito de mi memoria de quererte.
0 comentarios:
Publicar un comentario