NO TE LLENES DE MIEDO
No conduzcas siempre
por la sombra de tu camino:
a veces, algo de Sol,
aunque queme,
puede ser bueno.
Tampoco huyas de la lluvia.
Si moja y regala primavera
al prado estéril,
¿por qué iban a sentarte mal
unas cuantas gotas
en tu espalda desnuda?
Y tampoco pienses
en que todo este,
así como acaban las funciones
en los teatros,
también tiene un fin.
Solo piensa que hoy estás
aquí mismo, y te late
fuerte el corazón
para seguir andando.
No te llenes de miedo, en fin.
Y cruza el mar de la vida,
aunque sea solo con tus ganas,
y tus pies descalzos.
No te llenes de miedo.
1 comentarios:
A veces los miedos devoran los sueños y nos instalan en el desconcierto.
Un salud✴
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