MUCHOS NIÑOS ME CRECEN
Muchos niños me crecen
en la mirada, la desnudez,
los ojos, los labios y el alma.
Supongo que el tiempo
se detiene tanto
que me regresa a los días
en los que el mar tenía
esquinas en los patios,
y la primavera tierra pródigo
en los besos casi francos
de un amor platónico.
Ahora muchos niños me crecen
al clavar un poema en la forma
en la que te ríes casi del mundo
cuando me sonríes.
Y vuelvo a habitar el cielo
sin más alas que quererte.
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