TU CALMA
Tu calma ahora
murmura como el río.
En tu espalda llueve lujuria,
y el silencio pide a gritos
que le hable de ti,
mientras te amo.
En algún momento, solo hablan
los abetos desnudos del otoño
de la emoción que se desborda
de los labios como la corriente,
cuando atraviesa el mar
para llegar hasta tu orilla
con el deseo entre los párpados.
Y entonces para ser
solo existe el libre albedrío
de atarme a tu boca,
como si levar anclas hacia el cielo
solo fuese posible besándote.
En calma, mientras el mundo
exhala desasosiego.
Y respira tu voz cálida
entre todas.
Para decirme que me amas,
en calma, con tu calma.
0 comentarios:
Publicar un comentario