DURAS DEMASIADO
Aquella tarde ya dura
más de setecientos días.
Porque puede que tardáramos
un segundo en pegar
nuestros labios al cuerpo.
Yo aún te llevo atada
a mi recuerdo.
Y ese beso perdura,
quizás, hasta este poema.
De hace dos años
que no te olvido.
0 comentarios:
Publicar un comentario