MÚSICA PARA EL ALMA

sábado, 30 de julio de 2011

EN SILENCIO FIESTA




EN SILENCIO FIESTA

En silencio
haremos una fiesta.

Se te encenderán los ojos,
y el mar te recorrerá
las pupilas en una luz
aguada de pasión.

Nos diremos todo
sin muchas palabras.
Sellaremos los labios
en un beso,
y sonará en la noche
una sonata dulce de ternura
que sólo escucharán
nuestros latidos.

Haremos en silencio
la fiesta del amor.

viernes, 29 de julio de 2011

LO IMPOSIBLE




LO IMPOSIBLE

Lo imposible, a veces,
es algo posible
que tarda un poco más.

Los sueños discurren
lentos como un río
en calma en espera del mar.

Y cerrar los ojos, a veces,
cuesta algo más que el cansancio.

Más cuando despertarse
es tan duro como pedirle
a la gravedad del tiempo
que no atormente, ni pese
en el camino demasiado.

Lo imposible sólo es algo
posible que tarda algo más
en llegar con la esperanza.

COSAS IMPOSIBLES




COSAS IMPOSIBLES

Puedo escalar el agua,
trepar la lluvia,
pintar sobre los aguaceros,
esquiar en las nubes,
taparme con la desnudez,
y deshojar ola a ola
todo el mar como una margarita
buscando un beso de sal.

Escribo otro poema
sobre cosas imposibles,
y el café que se derrama
se vuelve un mensaje de cafeína
y ternura precipitada
sobre una losa de mármol.

El calor abriga la soledad,
y una viruta de humo
se cuela por mis párpados
para nublar la gravedad.

Son las cosas imposibles
de un verso.

miércoles, 27 de julio de 2011

DIFICULTADES




DIFICULTADES

Dificultades.
La vida está llena
de dificultades.

A veces, el corazón
pesa demasiado en el pecho,
cargar con la boca
y sus palabras tristes
es como llevar toda la gravedad
del mundo en una sola espalda.

Sellar el silencio, entonces,
es complicado. Y debo darle marea
a una lágrima encallada
en las mejillas
saladas de la nostalgia.

Dificultades.
La vida está llena
de dificultades.

Sin embargo, aún me siento
andar sobre los pies.

Mañana no será tan difícil.

martes, 26 de julio de 2011

LA CIUDAD EN VERANO




LA CIUDAD EN VERANO

La ciudad en verano
cansa, y fatiga, y hastía.

El reverbero de las calles
nubla los ojos, y se envuelve
el recuerdo en un cansancio
taciturno de siestas.

El trino de los pájaros
no recibe a mis oídos,
y de los alambres cuelga,
a veces, alguna prenda
de la memoria.

Detrás de las puertas
mora el silencio,
y en las piscinas, a veces,
chapotea un poco de nostalgia.

En los lagos hay algo más
que corriente:
las formas del agua
recuerdan unas veces un rostro,
y el color invisible
de algún golpe pasado.

El tiempo se dilata
en la urbe en verano.
Las horas se tornan largas
como una ola en la marejada,
y los relojes se vuelven
sastres esmerados de las horas
que tejen arrugas de confeti
en las vacaciones.

La ciudad en verano cansa.

lunes, 25 de julio de 2011

NO SOY NADA




NO SOY NADA

No soy nada.
Un pasillo de tormentos
poblado de algún claro
azul entre la tempestad.

Dos pies y sus pasos
consecutivos en las calles.
Nadie, algo para tu mundo.

TODO NACE UNA SEGUNDA VEZ




TODO NACE UNA SEGUNDA VEZ

Todo muere, y todo nace
una segunda vez,
como el vaivén de las olas
que va recordando la música
del mar en las orillas
como un grito
incesante del agua.

Todo muere, y todo nace
una segunda vez,
cuando surge el verbo
del pasado en los lápices,
y el sustantivo futuro
de un recuerdo empieza a existir
en la memoria de otro.


Todo muere, y todo nace
una segunda vez,
cuando no se olvida
más allá del corazón.

domingo, 24 de julio de 2011

MEDALLAS




MEDALLAS

Hay medallas que no huelen
a bronce, ni plata, ni oro,
ni a una victoria.

Medallas que no cuelgan
de una corona de laureles.
Medallas que no saben
precisamente a éxito
en algún pódium, y aplausos
enfervorecidos en las gradas.

Medallas que se ganan en cada paso
ganado a la acritud de las farolas
de las calles que despiden
cada noche miles de caminos,
y sombras que tejen
las sendas de la noche,
y los sueños.

Medallas que merecerían
ser gigantes en algún libro.
Y sin embargo, se quedan varadas
en algún recuerdo desconocido
de alguien futuro a ahora.

Medallas que se ganan
desde la lucha sin Olimpo.

Medallas por ser humano.

viernes, 22 de julio de 2011

TU HISTORIA




TU HISTORIA

Tu historia la cuentan
tus ojos, cuando lloran,
miran, y agitan sus pestañas
en cada parpadeo.

Y puede que no lo sepas.
Pero en ellos siempre escribo
algo que nunca será parte
de los gigantes laureados
de los libros: el dulce sabor
de la ternura en tus labios,
y el recuerdo del cariño
que rezuma de tus ojos.

En fin, tu historia
tras dos espejos de bondad.

TIEMPO DE PLASTILINA




TIEMPO DE PLASTILINA

El tiempo, a veces, no duele.
No se arrastra silenciosamente
en cada herida de la nostalgia,
y los recuerdos que van surcando
arrugas y pañuelos de agua y mar.

No duele, no hiere, no mata,
cuando se torna de plastilina
sobre algún papel en el que al sol
no puede taparlo una tormenta.
Y basta mover un lápiz
para aclarar el paraíso,
y llevarse un trozo de arcoiris
siempre en el bolsillo,
aunque no se refleje
la lluvia sobre el horizonte.

Me encanta
jugar al tiempo.

miércoles, 20 de julio de 2011

SUCEDE QUE SOY HOMBRE









SUCEDE QUE SOY HOMBRE






Sucede que soy hombre.



Y algunas veces quisiera



retornar al polvo y ser



más ligero que la corriente



del viento surcando horizontes:



la gravedad de los errores



pesa demasiado en el corazón,



cuando todavía se está vivo



pese a los silentes latidos



detrás del pecho.






Sucede que soy hombre.



Lo vuelvo a decir.



Y, a veces, me ahogo



en un vaso de agua.






Otras me gusta que la lluvia



surque con dulzura los besos



sin que haga estragos



un diluvio sobre la ciudad:



me encantan las tormentas



cuando saben a pasión,



y naranjas en la piel.









Sucede que soy hombre.



Imperfectamente hombre.

ESTAR TRISTE









ESTAR TRISTE






Estar triste, y sonreír


como un payaso, a veces,

al empezar el circo

de las oficinas y las bolsas


que no llenan

precisamente sueños.






Estar triste, y pensar


que aún puedo tocarte


sin que tu mirada


me diga adiós desde el abandono.






Aún cuento contigo


para no estar


más triste.

sábado, 16 de julio de 2011

NO TENGO EXCUSA



NO TENGO EXCUSA

No tengo excusa,
y aunque no sientas
cómo remojan mis mejillas
las lágrimas de culpa,
esta tristeza que ahora siento
no la puede calmar
ningún recuerdo alegre.

Soy un manantial de interrogaciones,
y labios arrugados
sin respuesta, una verdad
que ahora se sabe a medias,
y alguien que quiso ser bueno,
tal vez, sin llegar a serlo.

Y el dolor que te causa
se que no lo cosen
unos puntos simples de sutura
sobre la piel:
hay espadas que se clavan
más allá de la sangre.

No tengo excusa,
y sólo puedo, tal vez,
arrepentirme y pedir perdón
a medias también
como mi dolorosa verdad.
escribir perdón en estos versos

miércoles, 13 de julio de 2011

DUELES




DUELES

Dueles, a veces, igual
que las calles cuando andar
es gastar pasos de soledad.

Y tus ojos hieren
como espadas de luz
que no penetran
la sombra.

Dueles, a veces,
mientras te echo de menos.

Dulcemente dueles...

lunes, 11 de julio de 2011

TODO FINAL




TODO FINAL

Todo final puede ser
un buen comienzo
como lo eres tú
cuando tu cuerpo empieza
en mi sustantivo de aire
en tu ausencia.

Todo final puede se
un buen comienzo,
cuando amar se conjuga
en presente de indicativo
del verbo tierno
de nosotros.

En tus manos
he empezado a ser yo.
Y contigo siempre sé
que hay luz al final del túnel,
mientras pueda mirarte.

domingo, 10 de julio de 2011

EN EL BOLSILLO




EN EL BOLSILLO

Le doy permiso.
Sale de mi cazadora,
abre las alas, despliega
la vela mayor del margen.
La palabra se le vuelve agua
entre la tinta, y una servilleta
lleva algo más que una apología
a la mancha en sus límites.

Estoy soñando mientras camino.
Escribo. Su sangre
se torna dulce cuando la toca
mi silencio inconforme.
Quiero llevarme en el bolsillo
otro trozo del paraíso,
mientras vivo.

LA NOCHE ES CALLADA




LA NOCHE ES CALLADA

La noche es callada,
a veces, como la brisa
que no mueve los robles,
ni roza las pestañas,
y no mueve el cabello demasiado.

Sin embargo, en su silencio
de estrellas habla de muchas cosas.
A veces, siento que me cuenta
a qué saben los sueños
de hadas, cometas y gnomos
que aún cabalgan raudos
como mi imaginación
en las lágrimas de días pasados.

Y en su calma, el cansancio
me abate, y cierro los ojos.

Tal vez, quiero verla
contigo mejor,
aunque tu ausencia
sea callada como ella.

viernes, 8 de julio de 2011

NECESITO PALABRAS




NECESITO PALABRAS

Digamos que preciso,
necesito palabras
cálidas como un invierno
al abrigo de una estufa.

Palabras rojas, verdes,
azules, primaverales
y otoñales también.

Palabras que sepan a lluvia,
y respondan con un sol
de alegría a la luz titilante
y fría de las farolas.

Preciso, necesito palabras
que se puedan abrir y cerrar
como una puerta,
porque no siempre requiero
visitar a mi melancolía,
y a los amigos invisibles
de mi soledad muda.

Palabras con urgencia,
y palabras tranquilas
como la corriente del mar
bailando enredada con el viento
en su murmullo de agua.

Palabras de juguete
como trenes de aire
que no dejan esencia en el aire
de adiós y raíles oxidades.

Palabras de verdad
que cuenten mis guerras
con la tristeza, cuando nos quedamos
solos discutiendo en un bar
mis recuerdos y mi añoranza,
al caer la noche en el tiempo.

Palabras que sepan callar,
y reposar al filo del silencio
como una barca en el puerto
a la espera de levar sus anclas.

Y luego que hablen, quizás,
sin decir más que mis lágrimas.

Palabras que sepan esconderse,
cuando sellar la boca
en un beso es lo más bonito.

Y palabras que viajen
por las calles de la consciencia
como transeúntes privilegiados
de un chapoteo de mi vida.

En fin, digamos que preciso.
Digamos que necesito
palabras para mi poesía.

SOLO SOY UN HOMBRE




SOLO SOY UN HOMBRE

Solo soy un hombre.
Un hombre más,
otro ser humano
al que las puertas de una casa
preguntan por qué se va.

Alguien que escucha
cantar a las flores,
cuando la primavera
les da sus arrumacos.

Solo soy un hombre
con un cierto sabor
a melancolía,
y un cierto gusto
por el misterio
de los versos.

Para que así sea la vida...

¿CUÁNTAS VECES?




¿CUÁNTAS VECES?

¿Cuántas veces se habrá marchado?
¿Y cuántas habrá vuelto?

Besarla es recorrer su boca
de mármol, y abrazar
su cuerpo de preguntas
entintadas que, a veces,
encuentran su respuesta
en la ausencia de calles
hacia sus ojos.

¿Cuántas veces se habrá ido?
¿Y cuántas habrá vuelto
a estar conmigo
en cada sueño?

La quiero siempre.
Por eso, ya no sé
cuántas veces
habrá vuelto con mi nostalgia.

miércoles, 6 de julio de 2011

LA CASA ESTABA SOLA AYER





LA CASA ESTABA SOLA AYER

La casa estaba sola ayer.
Las puertas lloraban
en un crujido de acero,
y los pasillos clamaban
por la compañía de tus pasos.

La casa estaba sola ayer,
aunque algo la llenaba.

Mi soledad estaba contigo.



martes, 5 de julio de 2011

DAR MARCHA ATRÁS









DAR MARCHA ATRÁS






No se puede dejar de envejecer.



Y crecer sólo es algo alegre,



cuando huele a piñata



y regalos en papel charol.






Nadie puede desandar



los años ya andados,



y tampoco se puede evitar



que el otoño derribe los frutos



celestes de la primavera.






El agua sigue corriendo



bajo el puente y mientras tanto



pienso que mi tiempo



vuela como ella sobre sus ondas.






Soy eternamente efímero,



y no puedo dar marcha atrás



al tiempo.






Tan sólo tengo



una eternidad.

lunes, 4 de julio de 2011

ERAN OTROS TIEMPOS








ERAN OTROS TIEMPOS






Eran otros tiempos.



La ciudad no se oscurecía



tanto al caer la tarde.






Los ojos no se cansaban



de mirar para otro lado,



como a los sueños.






Despertarse era saludar



amablemente a los gallos



sin pensar en cuánto podían pesar



las mañanas de las prisas,



y los bares impregnados de café,



y barullo, y bullicio mundanal.






Los números romanos



en la escuela se sumaban



como las amapolas



en la primavera a las raíces



de la tierra.






En la piel un temblor dulce



respondía al miedo



a los fantasmas.






Sobre los puentes las estrellas



atravesaban un cielo de asfalto



y luz pavimentada.






El único deber de todos



era sonreír.






Salir de la crisis del 93



era menester



de preocupados mayores.






Y en el país de los Playmobil



se viajaba lejos,



como a un mar de distancia.






En el agua nunca se hundían



los raíles sin oxidar



de la inocencia.






Ya lo he dicho:



eran otros tiempos



en los que el tiempo



no costaba tantas arrugas,



y el único peaje a la fantasía



era el cansancio bien educado.






Y ahora tengo ya veintiséis años.



La ciudad se vuelve más oscura



al caer la tarde,



cuando la avenida se puebla



de lámparas agitadas



y soledades de huellas.






A dieciocho años estoy



de aquella felicidad.


sábado, 2 de julio de 2011

SOLO SUEÑO




SOLO SUEÑO

No estoy loco. Solo sueño
y, a veces, me indigno
porque despertar es duro
en la gravedad de las colas,
la pesadez pecuniaria
de la vacuidad de los bolsillos,
y el bullicio de las compras.

No estoy loco, solo sueño.

EN EL CONTICINIO




EN EL CONTICINIO

En el conticinio,
cuando nada puede impedir
que te ame
como yo quiero
que me ames.

Cuando todo está en calma,
Cuando todo es silencio,
y puedo declamar tu piel
para que vuelvas
desde tu ausencia
a tocar mi tacto
desesperado de fruta,
y primavera por fecundar,
y las palabras de ternura
que habrán de escribir
tus dedos sobre mi espalda.

En el conticinio
digo adiós a la ciudad.
Y regresa tu país
de flores a mi tristeza
dulcemente nocturna como tú.

viernes, 1 de julio de 2011

NO SÉ A QUIÉN DEJO









NO SÉ A QUIÉN DEJO






No sé a quién dejo


en este momento.






Tampoco conozco


la pregunta a una respuesta

mía de nadie.






El asfalto nunca habla.


Y, a veces, el silencio


se calla demasiado.






Es difícil saber a quién dejo


ahora tras el espejo.






Si he dejado algo más


que una silueta tras el cristal

de los años.